UNA NOCHE EN LA CARCEL

No es sueño de muchos estar en la cárcel (bueno, eso esperamos). Pero ¿qué pensarías si te decimos que muchas personas duermen en una VOLUNTARIAMENTE?

Así es, se trata del Hotel Alcatraz en Alemania, un lugar que te hará sentir como el convicto más peligroso del mundo.

TRAS LAS REJAS

Con una ubicación privilegiada en el centro de Kaiserslautern (cerca de restaurantes, cafés, museos y el imperdible Japonés Pfaltz Garden), encontrarás este extraño hotel, que alguna vez fue una prisión real.

Todo comenzó en 2007, cuando el Dr. Michael Koll y el Dr. Andreas Kirsch compraron una antigua prisión cerrada cinco años antes, y tuvieron la idea de convertirla en un hotel, manteniendo la autenticidad de las sensaciones de encierro y la “decoración” del lugar.

Así, Hotel Alcatraz, originalmente construido en 1867, fue ampliado; pronto se construyeron numerosos espacios como salas de trabajo, sótanos, áreas exteriores y una capilla. La transformación completa de la cárcel en hotel tomó 18 meses.

ES UN CRIMEN PERDÉRSELO

Nada más con ver la recepción te sentirás transportado a la mítica prisión ubicada a miles de kilómetros de distancia (en San Francisco, California, EE.UU.), en cuestión de segundos. Los barrotes te separarán de tu interlocutor y deberás estar preparado para colocarte en el papel de presidiario si quieres pasar desapercibido.

 

El hotel ofrece 56 habitaciones tipo celda que te permitirán comprobar cómo es la vida en la cárcel. Hay barrotes en las ventanas, camas originales de la prisión (hechas por los presos) e incluso un lavabo y un retrete dentro de la misma habitación. Si lo deseas, incluso pueden servirte el desayuno a través de la ventanilla de la puerta original.

¡No te preocupes!, las habitaciones de Alcatraz no carecen de las comodidades modernas, ya que todas incluye: conexión WiFi gratis, habitaciones para fumadores y no fumadores, habitaciones hipoalergénicas y calefacción.

Además podrás disfrutar de salas de reuniones, suite nupcial e instalaciones remodeladas teniendo en la mente a personas con movilidad reducida, así como servicios entre los que se encuentra el traslado al aeropuerto, alquiler de bicicletas, tienda de recuerdos y estacionamiento privado.

Si buscas algo más convencional podrás elegir habitaciones y suites con baño privado. El hotel también alberga el bar Hinter Gittern (tras las rejas, ¡claro!).

TU EXPERIENCIA, SU SATISFACCIÓN

Dentro de los paquetes encontrarás la “experiencia completa”, que consta de pasar la noche tras las rejas y con pijama de rayas, así te brindarán la posibilidad de vivir como un recluso, aunque sea por 24 horas.

La noche en una habitación individual cuesta alrededor de MX$1,300.00, y la doble te hará desembolsar unos MX$1,800.00.

¿Algo más? En un ala del hotel se han mantenido algunas instalaciones de la antigua prisión a modo de museo, para que se aprecie cómo eran las zonas de seguridad, los baños y demás secciones de este recinto penitenciario del siglo XIX.

Para esta experiencia única en la vida ¡es hora de portarse mal!