De la locomotora a los paneles solares

Hacer un viaje en tren tiene un toque de nostalgia, el paso por sus vías es como transportarse al siglo XIX o XX cuando este sistema de transporte reinaba en tierra y el sonido de la locomotora indicaba el comienzo de una aventura.

Ahora imagínate subirte a un tren que data de 1949, pero que ha sido restaurado de tal manera, que es el primero y único en el mundo (hasta hoy) en operar en su totalidad con energía renovable: la solar.

Se trata del Byron Bay Train, ubicado en la costa este de Australia, a 600 km de Sydney  y que opera desde diciembre de 2017. 

Conoce su funcionamiento y el tramo lleno de sustentabilidad que el turista puede disfrutar.

Restauración sustentable

En el mundo ya existen trenes que han puesto en marcha mecanismos para que su funcionamiento sea cada vez más ecológico, sin embargo todos muestran procesos híbridos que los permitan operar.

Byron Bay Train, llamado así porque es el destino donde opera, es el único 100% autosustentable sólo con energía solar y aunque sólo recorre tres kilómetros, del pueblo de Bayron Bay al resort Elements de Byron Bay, es el futuro y prueba latente de que el funcionamiento de un tren es posible sólo con energía renovable.

La velocidad a la que fluye es de 50km/h, ideal para apreciar el paisaje aunque llega a alcanzar los 115km/h. Sus dos vagones tienen una capacidad para 100 plazas y tal ha sido el éxito para el turismo, que ya tiene corridas nocturnas.

¿Cómo se recolecta tanta energía? El techo de los vagones está lleno de baterías y placas fotovoltaicas, sin embargo sus paneles solares no alcanzan para activar toda la batería que requiere el tren para su funcionamiento, que es de 77kWh (lo mismo que requiere un Tesla), asi que su creador Brian Flannery, también dotó de paneles solares cada estación donde el tren se recarga y así logra su marcha.

Además en su sistema de frenado, el tren logra regenerar el 25% de la energía a su batería, sin duda este corto paseo en tierras australianas es una experiencia futurista de cómo deberían ser los sistemas de transporte: 100% sustentables.