SUSURROS DE MAGIA: LA RUMOROSA

Sentarte en una roca y mirar al horizonte pensando en todo y a la vez en nada mientras ves ese paisaje ocre con tumultos de enormes rocas y un cielo de azul potente que parece rasgarse con los tonos rosáceos del atardecer es uno de los mejores momentos que puedes tener en La Rumorosa, Baja California.

Por mucho tiempo La Rumorosa fue conocida como “la carretera de la muerte” por sus perfectas curvas entre la Sierra de Juárez y conectando a Tecate con Mexicali, hoy este tramo ya no es de doble sentido, pero sigue siendo una osadía para conductores, y en los últimos 10 años se han habilitado senderos, rutas para rappel, geoparques y museos que la hacen un punto de referencia para visitar en Baja California.

El Vallecito es uno de los secretos inmersos entre las rocas de La Rumorosa, este es un sitio arqueológico donde se encontraron pinturas rupestres de los kumiai, grupo étnico que habitó la zona desde tiempos prehispánicos, en este punto podrás empaparte de las raíces del lugar y si tienes un guía conocer más de los kumiai y sus actividades en esta zona que parecería desértica, pero posee una riqueza innegable.

El nombre de La Rumorosa se debe a que el viento al pasar entre las montañas y golpear con las rocas genera susurros o rumores que son apreciados por quien pasa este tramo.

SE PINTA DE BLANCO

¿Amante del invierno? Entonces querrás estar en La Rumorosa en los meses de diciembre a febrero, es en estas fechas donde las nevadas hacen su aparición y las rocas quedan completamente escarchadas para brindar una vista completamente blanquecina.

En los miradores o el pueblo de La Rumorosa la gente suele pararse y jugar entre la nieve, además de disfrutar de la rica sensación (si estás bien abrigado, por supuesto) del caer de la escarcha sobre tu rostro.

EL RISCO DE LA AVENTURA

Otra parada en la zona es el Geo Parque Casa de Piedra, su nombre se debe a una construcción que se mimetiza completamente con el paisaje y que tiene un mirador donde las fotos no deben faltar, aquí también se puede practicar rappel o ciclismo de montaña.

Cabe mencionar que en este rubro La Rumorosa se ha convertido en spotlight de quienes practican estos deportes por tener montañas como El Centinela que se convierten en aventuras aseguradas entre sus rocas y senderos.

La magia del lugar en auto genera una adrenalina en quien conduce la carretera, es una sensación de ir manejando entre murallas rocosas y a los lados profundos acantilados, pero los copilotos son quienes más disfrutan, pues la mirada no sólo está en el asfalto, si no en las formaciones rocosas, algunas con estilos caprichosos y otras hasta asociadas con animales u hongos.

A lo largo de la carretera encontrarás miradores, tal vez hasta con telescopios, vale la pena que te pares en cada uno de ellos y aprecies los diversos paisajes que otorgan, hay quienes dicen que son parajes de otro planeta.