El mito hecho realidad: Cuixmala Hotel

Vivir en equilibrio con la naturaleza, sin depredación y con un consumo consciente y respetuoso suena a una bella utopía… ¡Alto! ¿dijimos Utopía?

Ubicado en medio de la Reserva de la Biósfera Chamela-Cuixmala, en Costa Careyes, Jalisco, está Cuixmala Hotel, la propiedad que por muchos años permaneció como un mito, oculta entre la exuberante selva y los riscos del mar Pacífico, ¡pero que hoy podemos apreciarla en todo su esplendor! 

Este resort de lujo fue construido por el empresario franco-británico Sir James Goldsmith, quien quedó fascinado del lugar en un sobrevuelo por el territorio, construyendo así su casa de descanso bajo una primicia: 

“Todos los seres humanos necesitan compromiso espiritual. De lo contrario, se convierten en máquinas de contar y creen que cada aspecto de la naturaleza no es más que un instrumento que puede ser manipulado, reparado o reemplazado”, Sir James Goldsmith.

Dale a un vistazo a este hotel boutique que cuenta con mayordomos, cocineros, seguridad, playa privada, una jungla a su alrededor con más de 300 especies de aves, jaguares y otros mamíferos, y por si fuera poco su propia granja con métodos de agricultura biodinámicos… ¡te lo dijimos, en Cuixmala la utopía se vuelve realidad!

Arte en cada muro

La arquitectura de Cuixmala está inspirada en edificaciones de la India y el Norte de África, sus paredes se yuxtaponen creando juegos de sombras entre los árboles frondosos y los acantilados rocosos.

En su interior paredes blancas que iluminan de forma natural todo su diseño y mobiliario que combina la mexicanidad con lo contemporáneo. Está compuesta por una casa principal, tres villas, seis búngalos y 10 casitas. Su suite principal es de las más codiciadas en el país al tener una amplitud envidiable, su propia terraza, alberca y una vista… ¡que por algo pagan USD$4,700 la noche.

Amigable en cada poro

Actividades como clases de yoga por la mañana, caminatas entre sus plantaciones de coco o tres kilómetros de playa privada pueden ser tu perfecta chispa para arrancar el día, pero sin duda un ejemplo de su compromiso ecológico está en su granja biodinámica.

Hacienda de San Antonio es el claro ejemplo de cultivar respetando los ciclos de la naturaleza y el terruño, casi todo lo que se cocina en el hotel proviene de aquí: hortalizas, frutos y hasta miel.

Las 25 mil hectáreas de selva que rodean a la propiedad también son hogar de cebras y antílopes que están en reserva, y tal vez quieras pasear a caballo o visitar sus cuidadas caballerizas. La cereza del pastel en esta conexión con la naturaleza que ofrece está en su programa de liberación de tortugas, que el año pasado cumplió 30 años y puede decir que ha cuidado de casi un millón de crías que son liberadas al mar para entrar en contacto con el ciclo de la vida. 

Cuixmala es sin duda un pedacito de conexión natural y respiro de vida en tierra mexicana.

Sus tres restaurantes: La Loma, Caleta Blanca y Casa Gómez, son la viva expresión de cocina de temporada, donde los ingredientes locales se mezclan con técnicas de alta vanguardia para impregnar el paladar de sabores mexicanos, franceses, españoles y más.